El queso manchego es mucho más que el alimento bandera de la comunidad autónoma por la que campaba Don Quijote de La-Mancha. Forma parte del patrimonio cultural, de un entorno natural concreto y de la riqueza gastronómica de sus cuatro provincias. Por eso, en la región siguen impulsando el lacteoturismo para que también los visitantes puedan descubrir todo acerca de la industria quesera que gira alrededor de un producto con DO. Si te interesa aventurarte en este camino y dejar a un lado el recorrido por los famosos molinos manchegos, te aseguramos desde ya que la oferta turística es muy atractiva. Puedes conocer de bien cerca cómo nacen los quesos procedentes de las ovejas autóctonas castellano-manchegas. ¡Atento a las rutas que te proponemos a continuación!
Adéntrate en el lacteoturismo más rural y auténtico
La experiencia de turismo enfocada a este derivado lácteo va acompañada del descubrimiento de unas fabulosas tierras manchegas que pasan por las provincias de Ciudad Real, Toledo, Cuenca y Albacete. Entre comarca y comarca, paisajes verdes se abren a tu paso con una autenticidad del mundo rural que no te deja indiferente. Porque conocer Castilla La-Mancha es igualmente aprender sobre uno de los productos más apreciados de la gastronomía. Desde la Denominación de Origen Queso Manchego quieren promover el conocimiento de dicho alimento. No hay mejor manera de conocerlo que viajando hasta su lugar de origen, desde el ganado ovino hasta la quesería, pasando por el centro de producción.
Quesos manchegos de oveja
Así pues, las rutas de lacteoturismo que puedes disfrutar en territorio castellano-manchego ya llevan siete años en marcha, tras la iniciativa que creó la Cofradía del Queso Manchego. Esta asociación gastronómica y cultural te propone recorridos por toda la comunidad pero siempre con el producto estrella como hilo conductor. Incluye las siguientes opciones, en las que al mismo tiempo puedes descubrir el patrimonio histórico, la naturaleza y la cocina típica de la comarca:
- Ruta del Camino de los Castillos
- Ruta de Dulcinea
- Ruta de Caminos del Vino
- Ruta de Campo de Montiel
- Ruta de los Calatravos
Esta última propuesta es la más popular y atractiva, al atravesar gran variedad de pueblos, entre los que destacan Almagro, Daimiel, Campo de Calatrava o la propia Ciudad Real. En tan solo dos días de escapada, se te abre la posibilidad de descubrir cómo se elabora el queso manchego paso a paso e incluso ver y tocar a las ovejas que aportan la materia prima. Si viajas con niños, esta experiencia seguro les fascinará. Sin duda, hablamos del lacteoturismo como una alternativa original y diferente a las más habituales de Castilla La-Mancha. ¿Te animas a probarla?
