Enclavada entre Navarra y la provincia de Burgos, es una región famosa a nivel mundial por sus excelentes vinos. Pero La Rioja te ofrece otros atractivos igualmente interesantes para descubrir, aunque ese vínculo con el sector vitivinícola no desaparezca. Porque al ocupar una zona ideal para los cultivos, los paisajes de viñedos te abren las puertas del mejor senderismo. Ese que te permite aventurarte a conocer los espacios montañosos y verdes riojanos, así como los encantadores pueblos repartidos por toda la comunidad autónoma. ¿Quieres saber qué puedes encontrarte por esas tierras más allá del vino y qué platos típicos degustar?
Algunos puntos imprescindibles
Además de cualquier bodega en la que puedes descubrir de cerca todo sobre la elaboración de las famosas botellas de los vinos con DOP RIOJA, hay mucha variedad de intereses. A lo largo de toda la provincia el turismo cultural y rural te lleva a castillos, cuevas, puentes, ermitas y monasterios. De estos últimos, los dos más famosos son el de Yuso y el de Suso, cuya pronunciación seguida resulta simpática. La enorme tradición de los conventos quedan perfectamente reflejadas a día de hoy en ambos templo riojanos.
Luego también están catedrales como la de Santa María de la Redonda en Logroño o la de Santo Domingo de la Calzada. Ente los entornos verdes cabe destacar el Parque Natural Sierra de la Cebollera, el único en La Rioja con esta distinción. Le acompañan las sierras de la Demanda y Urbión como otros dos montañas importantes para ascender. Al menos en época veraniega, pues durante el invierno en una de esas zonas la actividad ideal es el esquí en la estación de Valdezcaray.
Unas aguas termales en Arnedillo, un parque temático de aves rapaces en Calahorra o una ruta de los dinosaurios en Navalsaz diversifican más la oferta turística. A ella se suman otros lugares de interés muy rurales, tanto como lo son tantas familias bodegueras dedicadas a producir el bien más preciado de La Rioja. Por supuesto, museos y visitas con catas son pura esencia riojana.
Maridando el vino de la Rioja
Platos para todos los gustos y paladares forman parte de la gastronomía riojana que también debes descubrir en tu viaje a estas tierras tan vinícolas. Para maridar una buena botella de Rioja prueba alguno de los manjares típicos de allí. De los guisos, resaltan los de chaparrones, patatas a la riojana y pochas con codornices. Entre carnes, nada mejor que un pollo con fritada o una chuleta de cordero al sarmiento, aunque si quieres algo curioso y original degusta el embuchado riojano.
Ya con pescados el bonito al tomate o el bacalao a la riojana son exquisitos. Junto a verduras de un propio territorio en el que no falta un buen queso -el de Los Cameros– nos aproximamos a los postres. La pera o el melocotón con vino endulzan tu paladar aunque puedes optar por dulces típicos como los arropes o los fardelejos. ¡Cómete así La Rioja mientras vas conociendo sus puntos turísticos imprescindibles aparte de bodegas!