La gastronomía israelí es una de las más variadas del mundo. Una gastronomía que fruto y gracias a la historia única del país –construida por las sucesivas llegadas de judíos de todo el mundo– y fusionada con los propios de la zona de Oriente Medio. Aunque nada supera disfrutar de sus platos en las calles de Jerusalén, Tel Aviv, Haifa o Akko, siempre se puede empezar a conocer el sabor de Israel con los ingredientes presentes en muchas cocinas. Estos son algunos de los más populares y fáciles de hacer, y son, además, vegetarianos.
Sabich
Este es uno de los sándwiches más populares en Israel y tiene su origen en los judíos de Irak. Para elaborarlo, basta con cortar las berenjenas en tiras y, tras dejarlas secar, freírlas hasta que se doren. Cuando las tengamos doradas, las cortamos y ponemos dentro del pan de pita junto a tomate, pepino, huevo duro y hummus, y lo bañamos con un poco de aceite y sal.
Ingredientes: berenjenas, huevos, aceite, sal, pan de pita, pepino, hummus y, opcionalmente, amba.
Hummus
Este puré de garbanzos es uno de los platos más conocidos en todo el mundo, por su sencillez y sabor exquisito. Se suele servir como aperitivo, acompañado de un poco de pan de pita y aceite. Para elaborarlo es tan sencillo como añadir todos los ingredientes en la batidora y, mientras se baten agregar agua hasta que quede con la densa textura del hummus. Se puede aliñar con pimentón, perejil y aceite de oliva.
Ingredientes: garbanzos cocidos, aceite de oliva, ajo, zumo de limón en zumo, pasta de sésamo, perejil picado, pimentón y sal.
Falafel
El Falafel, ideal para ser servido como entrante, es una de los platos más populares de Israel en particular y Oriente Medio en general. Para elaborar el Falafel, primero de todo, se ha de dejar los garbanzos en remojo la noche anterior. Para empezar a cocinarlo, el primer paso es escurrir los garbanzos, y añadirlos con las cebollas, los ajos, el perejil, el cilantro fresco y una taza de agua en la batidora hasta conseguir una textura espesa.
Seguidamente añadir la sal, el comino molido, la pimienta negra, la levadura y mezclarlo un poco. Dejar reposar la mezcla aproximadamente 30 minutos. Después, formar con la mezcla pequeñas bolas –si la mezcla no permite hacerlas porque ha quedado muy líquida añade pan rallado. Y por último, freír en abundante aceite, a fuego medio hasta que queden dorados.
Ingredientes: garbanzos, cebollas picadas, perejil fresco, cilantro, ajo, comino molido, pan rallado, levadura en polvo, sal, pimienta negra y, para freír, aceite de girasol.
Shakshuka
Otro de los platos más populares en Israel por su exquisito sabor está elaborado con huevos cocinados en una salsa de tomate y es ideal para ponerlo para picar y mojarlo en pan.
Elaboración: pelar la cebolla y los ajos y picarlos. Cortar el pimiento en tiras finas y picarlo. Pelar y trocear los tomates. Poner una sartén a calentar con un chorro de aceite y añadir la cebolla, los ajos y los pimientos. Pochar a fuego lento hasta que esté tierno. Seguidamente incorporar los tomates, el laurel, el comino, la pimienta negra, la guindilla, el pimentón dulce, el azúcar y sal al gusto. Subir el fuego y, cuando empiece a hervir, bajarlo al mínimo y continuar con el fuego lento. Antes de que el tomate esté casi cocinado y el agua de los vegetales se haya evaporado, añade los huevos y sube un poco la temperatura para que la clara cuaje.
Se sirve los huevos escalfados en salsa de tomate y pan para poder mojar.
Ingredientes: cebolla, pimiento rojo, tomates maduros, dientes de ajos, guindilla, laurel, comino, pimienta negra, pimentón dulce, azúcar, sal, aceite de oliva y huevos.
Mujaddara
Este plato, que aparece mencionado en la Biblia (se dice que era el favorito de Esaú), es un potaje sencillo y riquísimo a base de lentejas y arroz o bulgur, un grano de trigo oriental (a escoger). Para empezar a hacerlo primero de todo hay que lavar y hervir las lentejas hasta que estén tiernas y después escurrirlas. Tras ello, freír las cebollas en tiras hasta que alcancen un color marrón dorado. Añadir las lentejas con la mezcla de parte de la cebolla y el aceite, y remover un par de minutos, para después añadir el arroz o el bulgur y agua para que cueza. La mujaddara se sirve con aceite de oliva y el resto de la cebolla frita para acentuar el sabor del plato, y a veces se puede coronar con un huevo frito. Los sirios judíos suelen comer este plato dos veces a la semana: caliente los jueves y frío los domingos.
Ingredientes: Arroz o bulgur, lentejas, cebollas, comino, sal y pimienta negra al gusto. Huevo, opcional.