Degustar este plato en uno de los asadores es una cita obligada al visitar la localidad de Aranda de Duero. La receta contiene un gran legado histórico y sitúa a la ciudad como referente gastronómico. Enamorando a todo aquel que lo descubre.
Los asadores, principales protagonistas, han interiorizado cada uno de los pasos del asado a lo largo de los años.
El lechazo asado es la seña de identidad de Aranda de Duero. El buque insignia de su gastronomía que ha perpetuado durante siglos hasta hoy. Su secreto es la simplicidad de los ingredientes. Estrechamente ligada al conocimiento de la tradición que vuelca las raíces y sabores de la tierra.
El encendido del horno es uno de los puntos clave de la elaboración. El proceso comienza desde primera hora de la mañana, y en él, el asador escucha cada uno de los sonidos del horno. entendiendo qué es lo que necesita.
La respiración de la chimenea y el crepitar del fuego. Se funden en un diálogo imprescindible para que el lechazo asado consiga su color dorado, su potente sabor y la temperatura justa. Horas de atención y dedicación llenas de pasión., durante las que los asadores comprenden la importancia de la materia prima y de las técnicas del asado.
El lechazo, más que gastronomía en Aranda de Duero
Algunos apuestan por el limón, otros por una pizca de manteca y otros simplemente añaden agua y sal. Se trata del mismo elemento principal, pero con una esencia única en cada uno de los asadores.
Porque cada maestrillo tiene su librillo. Las pequeñas diferencias que van desde los ingredientes empleados hasta la forma del horno hacen que cada lechazo arandino sea una experiencia exclusiva y muy especial. Una receta que necesita estar maridada con los vinos D.O. Ribera del Duero y la Lechuga de Medina.
Aunque la decimoctava edición de las Jornadas del Lechazo finaliza en el mes de junio. Aranda de Duero continúa siendo la capital del Lechazo Asado durante los 365 días del año.
Un destino único y listo para ofrecer las mejores vivencias a los amantes de la gastronomía, de la historia, de la cultura, de la naturaleza… Para conocer en cualquier estación y dejarse llevar por la arraigada tradición impregnada en cada uno de sus rincones.
